Muchas veces me preguntan cómo lo hago para gestionar el hogar con los 3 y sin que vayan al cole.
Te voy a explicar mi truco para gestionar el desayuno con calma y tranquilidad.
Nosotros nos despertamos sin alarma. A veces me despierto yo primero o el peque, pero la que suele venir primero a mi cama es la mediana. Se acurruca conmigo y así nos vamos despertando. Remoloneamos porque podemos y nos gusta.
Algún día el peque se queda durmiendo y nos levantamos la mediana y yo. Otros están las mayores y el peque duerme y otros días nos despertamos los tres.
Sea cómo sea, después de remolonear me tomo 10 min para estirar y movilizar el cuerpo en la cama. Es una rutina corta y sencilla que hago mientras entretengo a bebé y que interrumpen las niñas a veces para que les ayude en el baño.
Después de esto salgo a darle los buenos días al sol con bebé en brazos. Solos unos minutos, pero lo suficiente para regular el ritmo circadiano y que la energía comience a fluir. Es la señal de que tenemos un nuevo día por delante.
Cambio a bebé y lo dejo en la alfombra jugando o lo porteo a la espalda, dependiendo de lo que él necesite.
Las niñas normalmente se levantan con hambre y, para no tener que correr con el desayuno, les preparo un bote pequeño dónde pongo algunas cosas para comer (algunas pasas, unos anacardos, un poco de jamón y algo de queso). También les pongo agua en sus vasos para que ya la tengan preparada. Esto va muy bien porque así ellas tienen sus necesidades cubiertas y no tienen que venir a demandar mientras me encargo del desayuno.
Mientras comen se ponen a jugar.
Aprovecho entonces para recoger las camas y preparar la ropa para que se puedan vestir.
Una vez hecho me pongo con el desayuno. Para desayunar en los últimos meses estamos haciendo tortillas, algo de carne o embutido, leche caliente con cacao y/o canela ahora que las mañanas comienzan a ser frescas.
Para el peque le estoy haciendo tortitas porque la tortilla no le gusta.
La receta de las tortitas para el peque de 8 meses:
- 1 huevo de nuestras gallinas
- 1 cucharada generosa de masa madre
- 1 trozo de plátano chafado
- Una pizca de bicarbonato
Se mezcla con un tenedor y las hago con manteca en la sartén.
El desayuno tarda un ratito en estar listo y en este tiempo normalmente las niñas juegan mientras comen lo que les he preparado, vienen a contarme algo, hablamos, cantamos alguna canción, beben agua.
Cuando tengo el desayuno listo. Les informo que el desayuno está listo y que deben vestirse. Yo me visto también y les ayudo en lo que necesiten.
Por último desayunamos en familia.
El truco imprescindible para que fluya la rutina de desayuno y empezar bien el día.
Para mi la clave está en organizarme bien para que las niñas tengan a su alcance los que necesiten sin necesidad de esperar a que yo termine de hacer el desayuno. También muy importante mi ratito de estiramientos y la bienvenida al sol. Esto me hace sentir cuidada y atendida desde por la mañana y me ayuda a sacar mi calma interior para transitar las necesidades de la crianza.
Espero que te haya ayudado y si necesitas saber más sobre cómo tener un crianza con calma, hecha un vistazo a mi:
Taller Despertar la calma interior en tu crianza.
PD: Hace días que no bajamos a desayunar fuera porque las avispas vienen y nos molestan mucho. Se juntan un montón a robarnos la comida y hace unos días una le picó al bebé. ¿Sabes cómo ahuyentarlas? Escríbeme en comentarios 👇🏻
