Tu hijo es tu espejo

Es muy posible que hayas pasado o estés pasando una época con muchos conflictos en casa.

Sueles darte cuenta que tu hijo no te hace caso, está irritable, rebelde, demandante. Todo esto suele ser porqué hay algún malestar que no sabe gestionar.

La inteligencia emocional es una habilidad compleja que los niños aún no han desarrollado. Además los niños son muy sensibles y esto hace que el entorno, en especial mamá, influya mucho en su estado emocional.

Es por esta razón que, cuando nosotras tenemos un desequilibrio emocional, nuestros hijos lo reflejan, cómo un espejo, en su estado emocional también.

Fuera culpas y bienvenida la señal de alarma

Esto no nos tiene que hacer sentir culpa, sino sentirnos agradecidas por darnos cuenta de qué es lo que debemos atender.

¿Qué podemos hacer cuando esto ocurre?

Lo primero, es la atención al conflicto. Cuando aparece el conflicto con nuestros hijo, gestionar nuestra reacción emocional. Es importante validar nuestro sentir y poder dar una respuesta tranquila con los límites adecuados.

Lo segundo es atender nuestro desequilibrio emocional y nuestras necesidades. Nos puede ayudar el “journaling” para poder entender qué nos está pasando y poder transitar nuestros estado actual. Creo importante en este punto ser compasiva y pacientes con nosotras mismas. Los desequilibrios emocionales pueden necesitar ajustes o ser un estado pasajero que transitar. Trátate con amor y respeto.

Si necesitas más ayuda para aprender habilidades que te permitan vivir la maternidad con calma, te invito a mi formación Despertar la calma interior en tu crianza.

Espero que te ayude 🙏🏻

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *